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Novus Ordo Seclorum

 

Luna Bengoechea Peña, 2017.

Centro Atlántico de Arte Moderno · CAAM. Intervención con granos de soja verde y arroz.

NOVUS ORDO SECLORUM (“Nuevo Orden de los Siglos”) 

Texto: Blanca de la Torre

 

 

Luna Bengoechea Peña adopta las semillas como base de su propuesta artística, en esta ocasión para señalar la perversidad especulativa de la industria alimentaria y poner sobre la mesa las lógicas financieras en contraposición con las de la propia naturaleza.

 

La semilla se ha convertido en un símbolo de poder de doble filo: el del mercado y las corporaciones en su lucha monopolítica, y el de la semilla que representa resiliencia, fuente de vida y justicia ambiental. 

 

En la obra de Bengoechea a esta problemática se une la idea de los granos como “commodities” y del mercado como institución de control en crecimiento constante, señalada a través de una instalación a modo de mosaico sobre el suelo; una suerte de mandala de “agro-commodities”, que también alude a las relaciones comerciales a lo largo de la historia entre Europa, América y Asia.

 

La alfombra de grano, ya característica de sus proyectos anteriores, ahora se complejiza con siete fotografías que documentan el crecimiento de una planta de soja junto a sus valores en bolsa, que fluctúan cada minuto en el mercado internacional. Esta idea del mercado como institución de control y dominio se potencia a través de la iconografía de la moneda líder mundial, al apropiarse del ojo inserto en la cúspide de una pirámide que aparece en los billetes de dólar. Este ojo funciona como símbolo de control y dominio, del mismo modo que el propio mercado, invisible, abstracto y poderoso, que rige hoy en día el nuevo orden, aquel de los siglos a los que alude el lema de los billetes (NOVUS ORDO SECLORUM), y del que Bengoechea se apropia como título del proyecto. El ojo también hace un guiño irónico a las dotes adivinatorias, en relación al modo de especular con los granos en el futuro, siendo posible conocer su valor varios meses antes de su cosecha.

 

La filósofa y activista india Vandana Shiva señala cómo las semillas están en el centro de las múltiples crisis interconectadas a las que nos enfrentamos hoy día[1]. Es la misma agricultura industrial que crea hambre y enfermedad quien está contribuyendo más al Cambio Climático y la erosión de la biodiversidad.

 

En la obra la soja está mezclada con arroz, y para conseguir ambas semillas la artista ha tratado de apoyar a los pequeños comercios, algo también habitual en su práctica. Su trabajo se dirige así desde lo local a lo global, desarrollando un discurso transnacional que habla de soberanía alimentaria y de la importancia de construir otras alternativas de resistencia contra el poder corporativo. 

 

Su instalación se convierte  así en un alegato en contra de la financiarización de la naturaleza, la concentración de la riqueza en manos de unas pocas empresas, de lo intolerable de la propiedad intelectual sobre los recursos naturales y la inseguridad alimentaria y su dependencia de las leyes de mercado respaldada por los discursos oficiales al servicio de las grandes corporaciones.

 

 

 

 

 

 

[1] Vandana Shiva, Seed Satyagraha. Civil Disobedience To End SeedSlavery. (Florence: Navdanya International, 2015).

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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